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sorry
marco treviño
22 de septiembre - 29 de octubre de 2022
El trabajo de Marco Treviño se inserta en el cruce del minimalismo y de las prácticas conceptuales vinculadas a la crítica institucional. Esta filiación está por supuesto informada por la fortuna crítica de dichas prácticas en las últimas décadas: gestos que buscaban poner en crisis a la institución artística se han convertido en un reclamo estético que inunda tanto los museos como el mercado contemporáneo. Este cruce entre pensamiento crítico y cierto tipo de arte basado en la abstracción y en la repetición de patrones está en el corazón de todas sus propuestas, a su vez arraigadas en una amplia experiencia como gestor cultural y organizador de exposiciones. Treviño conoce desde dentro el lenguaje, los modos y las prácticas mediante las que el arte se acomoda a los formatos y marcos institucionales, un camino inevitable a lo largo del cual las propuestas terminan más o menos alejadas de donde empezaron.
Su primera exposición en Proyecto Paralelo se titula SORRY, una disculpa que nos alerta ya sobre nuestras expectativas, no sólo con respecto a su trabajo, sino sobre todo frente a la maquinaria del arte que la mayoría de las veces promete más de lo que cumple. Así, Treviño nos presenta a través de diversas técnicas y estrategias los elementos discursivos que van acompañando a los objetos hasta que éstos llegan al público: los Textos de sala muertos (2022) que sirvieron para explicar exposiciones aparecen aquí como restos dispersos e inconexos. Los Reportes de condición (2022) que se rellenan concienzuda y protocolariamente cada vez que una obra cambia de sitio se convierten en poéticas y misteriosas composiciones que hablan de imágenes-fantasma. Los subrayados rojos que resaltan los errores en nuestras pantallas -Línea roja (2022)- se presentan en medio del espacio expositivo como objetos imposibles de evitar y en SORRY (2022) -la serie que da titulo a la muestra- las tipografías de importantes instituciones museísticas de todo el mundo piden perdón una y otra vez: por los errores del pasado pero también los del futuro, por las expectativas no cumplidas, por las limitaciones de la representación y hasta por sus buenas intenciones.
La obra de Marco Treviño tiene siempre un componente social y público que en esta ocasión se desliza a la serie Libro de comentarios (2022) en el que invita al público a dejar su opinión o reflexiones sobre la muestra. El libro funciona como un puente, por más precario que sea, entre lo que la exposición quiere y puede ofrecer y lo que el visitante está dispuesto a recibir.
Contra lo que pudiera parecer, la visión de Treviño no es de ningún modo pesimista. Finalmente ha producido una exposición completa en la que, al contrario, nos invita a mirar con atención esos mecanismos y a integrar esas decepciones dentro de nuestra experiencia del arte como una estrategia poética y política. Esta confrontación con la materialidad e institucionalidad del arte ha de ser la que nos motive a seguir creando obras, produciendo exposiciones, visitando museos y galerías y a seguir pensando y hablando sobre todo ello. Treviño encuentra la estética e incluso la belleza que hay en esos gestos burocráticos, en esas visitas de compromiso, en esas experiencias que se quedan un poco cortas, en ese bajón que hay después del entusiasmo que genera una nueva pieza, una nueva feria o una inauguración, dejando abierta la posibilidad de que por ahí asome la parte del arte que de vez en cuando supera todas nuestras expectativas.
Marco Treviño (Monterrey, 1986). A sus 18 años viajó a la India para iniciar sus estudios artísticos. Al regresar a México cursó la Licenciatura de Artes Visuales y Mediáticas en CEDIM, (Monterrey y Ciudad de México). Paralelo a su formación universitaria fue cofundador del colectivo “La Orgía” y operó como curador residente dentro del proyecto (ONF) Object Not Found de Rubén Gutiérrez. Al concluir su licenciatura fue cofundador de “La_Compañía”, un advenimiento independiente enfocado en la producción, estudio y difusión de arte contemporáneo. Creador y coordinador de TADEO (Tácticas Artísticas de Ocupación), un programa de vinculación y educación artística complementaria en colaboración de CONARTE y el Gremio de Artes Plásticas de Nuevo León. Fundador de B4, espacio alternativo enfocado en formatos expositivos. Coordinador de programas y residencias para Lugar Común - espacio vinculado a la XII Bienal FEMSA, 2016. Director del Programa de Arte Público LARTES - FISL, una iniciativa de Las Artes Monterrey en colaboración con el Festival Internacional de Santa Lucía 2019-20. Actualmente funge como gerente de exposiciones para el Museo de Arte Contemporáneo de Monterrey (MARCO).Ha exhibido su trabajo en proyectos, exposiciones y festivales en Colombia, España, Francia, Italia y Suiza, así como en recintos culturales mexicanos como el MUCA Roma, El Museo Universitario del Chopo, el Festival Transitio en el Centro de la Imagen, Bienal FEMSA, ESPAC y Centro de las Artes.
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marco treviño
September 22 - October 29, 2022
Marco Treviño’s work can be placed at the crossroads of Minimalism and Conceptual practices that remain close to Institutional Critique. This affiliation is of course informed by the critical fate that these strategies have encountered in the last couple of decades: gestures that were intended as incisive and crisis-inducing have become an aesthetic claim that pervades both the art market and art institutions. This mix of critical thinking and an art that stems from abstract and repetitive patterns lies in the heart of Marco’s practice, but it also feeds from his ample experience as cultural manager and exhibition organizer. Treviño knows institutional language and tactics from within and is well aware of how the process of adapting an artwork for its insertion in the system inevitably leads to some level of adjustment.
His first solo show in Proyecto Paralelo is fittingly titled SORRY, an apology directed to our expectations, not only towards his work, but also in relation to the machinery of an art system that most of the time promises more than it can deliver. Treviño presents, through diverse strategies and techniques, the discursive elements that surround the passage of the artworks all the way onto the public sphere: In Textos de sala muertos (Dead exhibition wall texts, 2022), the vinyl words used to contextualize and explain artworks re-appear as disperse and disconnected fragments. The condition reports -Reportes de condición (2022)- that are painstakingly filled for each transfer of a work to a new venue turn up as poetic and strange compositions that try to define invisible images. The red line that marks mistakes on our screens -Línea roja (2022)- becomes a physical and unavoidable presence, while in SORRY (2022) the letter types from various art museums and institutions from around the world seem to ask our forgiveness for past mistakes but also for the ones in the future, for unfulfilled expectations, for the inevitable limits of representation and even for their good intentions.
Marco Treviño’s practice always has a public and social component, which on this occasion comes through in the series Libro de comentarios (Guest book, 2022). Treviño invites the audience to write their thoughts and comments on the show. This disarticulated notebook serves as a bridge, even if a precarious one, between what the show can and will offer and what the audience is ready to receive. In any case the artist’s vision is by no means pessimistic; he has after all produced a show that invites us to look into these mechanisms and to integrate these deceptions within our experience of art as a political and poetical strategy. This confrontation with the material and institutional side of art is still the guiding force that makes us create works, produce shows, visit galleries and museums and that keeps us thinking and talking about it all. Treviño finds beauty in these bureaucratic gestures, in the all-too didactic guided tours, in those experiences that fall a bit short and in the blues that we get after the excitement of a new opening, a new art fair, a new show, but mostly he never gives up the chance that art will surpass, once again, all our expectations.